Me convirtió en una observadora y aprendiz, del comportamiento de la gente.
El cuerpo habla claramente, muchas veces traicionando a su interlocutor, y ante un silencio sospechoso, nos puede guiar hacia la luz: "Lo que la boca calla, el cuerpo dice."
Obviamente, como todo, el observar requiere de paciencia, aprendizaje y mucha atención. Muchas veces me pasó, como está última vez, al terminar, decir: “El no era así cuando lo conocí”. Pero, luego, me puse a pensar en nuestro tiempo jutnos y me d i cuenta, que algunas acciones, posturas, y miradas de su parte me estaban gritando su verdadera personalidad.
Las primeras citas (hablo mas de tres citas, donde todo es lindo, rosa, perfecto, pura seducción) es un muestrario de señales: uno toca temas puntuales, “importantes“, en una atmósfera relajada que muchas veces provoca que uno baje la guardia. Si uno presta atención y ve como reaccionan los cuerpos, se puede obtener mas información de la que una piensa: Por ejemplo, si ante una pregunta como por ejemplo “Contame, sos celoso?”, nuestro compañero lanza una risita nerviosa, responde con otra pregunta, se acomoda en su silla y carraspea, es porque tocamos un botón, y lo más seguro es que la respuesta sea sí.
Otro ejemplo: Si al hablar de sus ex amores, cruza los brazos es porque se encuentra a la defensiva, muestra resguardo, un poco de desconfianza. Pasado tumultuoso y algún corazón roto por ahí. Ojo al piojo ahí. Si esas son las señales, es que todavía la herida se encuentra fresca, así que mejor, huir hacia la derecha.
La postura nos cuenta también que ondillas el señorito: Si cuando está parado, pone las manos en la cadera, es porque le gusta agrandarse, es soberbio. También puede ser una señal que se interpreta como enojo.
Si te das cuenta que no deja de mirarte los ojos y la boca,mi querida, usted puede gritar victoria, ya que el señor demuestra un alto interés en su humanidad. Lo que se dice, en criollo, está caliente con usted.
Otro detallín es que si ves que parpadea mucho, (primero asegurate que no sea un tic) es porque la persona que tenés en frente es un poco inseguro, y si no te mantiene la mirada no estás tratando con una persona muy transparente que digamos (excepciones: Los terriblemente tímidos)
Si se sienta rígido es porque está nervioso, tensionado y muchas veces puede reaccionar agresivamente. Si reacciona así aunque sea una sola vez, lo mas seguro es que en cualquier situación en la cual se sienta presionado, vuelva a responder igual. Es un NO rotundo.
Si tiene las manos relajadas, abiertas en todo momento, demuestra que es una persona sincera, que no tiene nada que ocultar, en cambio si sucede lo contrario, es porque está nervioso.. Tensionado y a lo mejor, te está ocultando algo.
Si en tu cita, el 90% de la charla es sobre él y contado por él, estás frente a un ególatra que va a requerir de toda tu atención… El va a ser el planeta y vos el satélite… se entiende? No es bueno para la salud... mental. Fuchi fuchi.
Como estos ejemplos hay muchos más, la lista es eterna si se quiere, ya que por suerte siempre se aprende algo nuevo del comportamiento humano, pero lo importante es saber, que aprender a ver las “señales” nos puede salvar de aquel hombre que nos quiere vender espejitos de colores, convenciéndonos de palabra que es un amor relleno con merengue, y en realidad es un sapo radioactivo. Si prestamos atención al lenguaje corporal del otro, vamos a poder ir formando una idea anticipada de cómo es la persona, y que su forma de ser no nos agarre desprevenidas.
Todas tenemos un caramelito media hora bajo la almohada… Es hora de dejar de coleccionarlos… Pónganse su traje de inspector Gadget y descubran a quien tienen al lado... las pistas están ahí, al alcance de su mano.
Cocki Sarli
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